-Escribe un breve texto en el cual compares la situación de los campesinos durante la época de la Revolución francesa y la actualidad. Menciona si la importancia de este grupo social y sus condiciones de vida han cambiado y explica por qué.
Respuestas
Los campesinos franceses en los años previos a la Revolución vivían una situación complicada. Existían tres clases de campesinos: los propietarios grandes, los medios y los jornaleros. Los primeros fueron los únicos que tuvieron un mejor pasar gracias a la alza del trigo pero a los dos restantes el dinero no les alcanzaba. Si bien ambos tuvieron un aumento de ingresos, lo cierto es que los impuestos los asfixiaban. La presión fiscal combinada del rey, con la de los señores feudales y la eclesiástica pasó a ser abrumadora y una de las causas de la explosión de la Revolución.
En un país agroindustrial como el nuestro, la situación de los campesinos (productores) sigue siendo complicada. Aún existen grandes propietarios, medianos y pequeños (a estos también los podemos llamar agricultores familiares). Los grandes son los únicos con las herramientas para combatir una mala cosecha y vender su producción cuando sea más beneficioso para ellos ya que cuentan con las herramientas y el dinero que se lo permiten (silos, inversiones, etc.). Los medianos pueden juntarse en cooperativas y actuar en grupo para que el dinero se licúe menos. Los que suelen tener una situación mucho más complicada son aquellos agricultores de subsistencia; aquellos que una mala cosecha puede sacarles el alimento de la boca y ni hablar de aquellos que la producción orgánica que generan es su único alimento. La agricultura depende del clima en gran medida, así que de eso dependerá también la cantidad de ingresos en divisas que puedan llegar a tener. Pero hay gastos (fitosanitarios, impuestos) que son obligatorios en todas las cosechas.
Las diferencias con los campesinos de la edad media no son tantas pero hay una importante si uno es un gran productor argentino, y es que las ganancias ingresan en dólares y eso es un aliciente. No sucede esto con los pequeños productores que, básicamente, les pasa lo mismo que a aquellos que acompañaron la Revolución.
