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De los discursos y cartas de Simón Bolívar se desprende que su ideal económico en modo alguno era comunista sino más bien un mercantilismo basado sobre sólidos principios morales. Sorprende cómo la búsqueda de la perfección Moral en el pensamiento de Simón Bolívar ha sido y es ignorada por quienes han hecho del Libertador una bandera política, dejando de lado su naturaleza filosófica y el más profundo ideal de búsqueda de una democracia perfecta, a través de un sistema jurídico justo, capaz de garantizar la igualdad de derecho de disfrutar de los bienes nacionales y la libertad, encausando la acción de los gobernantes hacia estos objetivos.
Simón Bolívar asignaba especial importancia a la economía para la existencia de una entidad política, en ese sentido comentaba: “Para aumentar las rentas e igualarlas a los consumos públicos es necesaria una buena administración en el ramo de la hacienda”
“El modo de hacerse popular y de gobernar bien es el de emplear hombres honrados aunque sean enemigos” Siendo la honradez y la competencia sus únicos requisitos para el servicio del Estado. Define al dinero como “El aire vital de las sociedades” “Las rentas son el nervio de la república” “La vida del Estado no se alimenta sin que el oro corra por sus venas”. Con esas expresiones evoca fórmulas mercantilistas y fisiocráticas en una suerte de “naturalismo económico”. La hacienda es la “fuente del bien y del mal”, “la madre del crédito público”. En este sentido, Bolívar legisló sobre los recursos naturales, los bosques, las aguas, el pastoreo, los hidrocarburos y otros minerales, todo con el fin de reformar las rentas para aumentar las posibilidades materiales del Estado y, por ende, para satisfacer más y mejor las necesidades del colectivo.
Las rentas originadas por una economía de mercado tendrían el destino social de satisfacer las necesidades de todos los individuos de la sociedad independientemente de sus diferencias individuales. Bolívar nunca dejó de lado su ideal de libertad, haciendo honor a su título de Libertador.
En cierto modo se anticipa al materialismo dialéctico cuando subraya sin vacilar la relación entre la economía y los hechos históricos y sociales. Cierta vez comentó a Santander: “Acuérdese usted que una de las principales causas que motivaron la Revolución francesa fue el mal estado de su hacienda”.
La independencia y la autonomía de América tienen para él una base económica importante, pues en parte se debe a la imposibilidad de España de mantener financieramente a sus colonias, se asombraba que el viejo continente no se percatara de las ventajas que le brindaba la emancipación americana “¿Está la Europa sorda al clamor de su propio interés?”
“Valor, riqueza, ciencia y virtudes, estas son las cuatro potencias del mundo corporal, estas son las reinas del Universo”.
En el discurso de Angostura expresó: “Que los hombres nacen todos con derechos iguales a los bienes de la sociedad”. La igualdad es una igualdad política para disfrutar los bienes y derechos sociales. Fue Bolívar el que inventó la frase feliz que corresponde sustancialmente a años posteriores “Seguridad Social”. Con la seguridad social, unida a la estabilidad política y la mayor suma de felicidad construyó en Angostura el tríptico para un gobierno óptimo. “El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”. Para Bolívar “La libertad civil, la seguridad individual, la propiedad y la igualdad ante la ley se garantiza a los ciudadanos en la constitución”.
Frente a la propiedad declara “El derecho de gozar y disponer libremente de sus bienes y del fruto de sus talentos, industria o trabajo”. Siendo el fundamento de la propiedad, la equidad, la moral y la justicia; cuando éstas faltan la propiedad es usurpación y violencia.
En el Gobierno concebido por Bolívar priva lo moral “El gobierno debe ser justo, liberal, fuerte, popular y sencillo; y todo ello cristalizará jurídicamente en un gobierno Republicano, civil y democrático”. Se opone a un tipo de gobierno Federalista que a su juicio resulta débil y complejo.
La síntesis del gobierno aspirado por Bolívar es un “gobierno que haga reinar la inocencia, la humanidad y la paz. Un gobierno que triunfe bajo las leyes inexorables de la Igualdad y la Libertad”.