Porque en la sabana africana despues de que las hojas de los primeros arboles de acacia hn sido comidas por los hrbivoros, las hojas de las demas acacias se vuelven toxicas para estos herbivoros
Respuestas
Las Acacia son unos árboles muy ornamentales y resistentes, tanto es así que se le puede encontrar en todos los jardines con clima templado y cálido de todo el mundo. Sin embargo, además de ser unas plantas muy decorativas también guardan un pequeño secreto. Un secreto que mucho tiene que ver con el instinto de supervivencia, no sólo de un ejemplar, sino de todos los que haya en un mismo territorio.
Y es que estos increíbles seres vegetales se defienden de los animales herbívoros. Pero, ¿cómo?
Flores de Acacia
En climas tan secos como el hay por ejemplo en los alrededores del desierto del Sáhara, los animales tienen muchas dificultades para encontrar comida: mientras que los carnívoros deben de dedicar bastante tiempo a acechar a su presa, cazarla y luego protegerla de los carroñeros para que pueda probar bocado, los herbívoros sobreviven pastando… o alimentándose de las hojas de los pocos árboles que se van encontrando.
Hasta aquí parece que no hay nada extraño pero, ¿y si te dijera que esos árboles, concretamente las acacias, se pueden comunicar entre ellas para protegerse? Estas plantas normalmente no llegan a ser más que unos raquíticos arbustos, y es que hay que tener en cuenta que tanto las jirafas como los elefantes son unos auténticos devoradores de hojas. Pero cuentan con el ‘apoyo’ de sus congéneres.
Espinas de Acacia tortilis
Cuando los herbívoros empiezan a comerse sin cesar las hojas de nuestra protagonista, ésta empieza a emitir una hormona vegetal llamada etileno, que se encarga del crecimiento de la planta y de la maduración de los frutos. Este gas viaja hasta 45 metros, por lo que una vez recibida la señal la acacia comienza a producir tanino, el cual en dosis elevadas resulta letal para muchos animales.
Cuando los herbívoros empiezan a comerse sin cesar las hojas de nuestra protagonista, ésta empieza a emitir una hormona vegetal llamada etileno, que se encarga del crecimiento de la planta y de la maduración de los frutos. Este gas viaja hasta 45 metros, por lo que una vez recibida la señal la acacia comienza a producir tanino, el cual en dosis elevadas resulta letal para muchos animales.