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Oceanía es la quinta parte del mundo. No se asemeja a ninguna de las otras cuatro. Asia, América, África y Europa son continentes o partes de continentes; los mares y océanos que los rodean son simplemente límites más o menos artificiales. Aquí, en cambio, el océano, el gran océano Pacífico, prestó su unidad y su nombre a este conjunto. Oceanía es un mar salpicado de tierras y no una tierra rodeada de mares.
Este pequeño continente, cuya extensión es igual a las tres cuartas partes de Europa, limita en el oeste con el océano Índico, y su costa meridional se abre sobre los mares australes. Pero su frente oriental está bañado por el Pacífico; la mayor de la Australia “útil” se vuelve hacia el Gran Océano.
Agrupemos aquí, con el nombre de Oceanía: Australia, Nueva Zelanda y los pequeños archipiélagos que salpican el océano Pacífico. Pero Nueva Zelanda, y más aún la enorme Australia, tienen aspectos físicos y humanos tan originales que deben ser descriptos separadamente.
Los archipiélagos oceánicos (sin incluir Australia) tienen una superficie menor si se los compara con la inmensidad del mar: 380.000 km2, de los cuales más de dos tercios corresponden al archipiélago neozelandés (270.000 km2).
Para los 110.000 km2 que ocupan, las verdaderas islas del Pacífico son extraordinariamente numerosas: por lo menos 10.000, de las que muchas solo son ínfimos islotes; podrían agregarse todos los arrecifes que enmarcan apenas el océano y que sólo tierras para los que se destrozan allí.
En el primer viaje de circunnavegación del globo, Fernando de Magallanes descubrió las Marianas y otras islas de Oceanía, antes de encontrar su muerte en las Filipinas. Poco después explotaron la región los portugueses; en 1525 Diego de Rocha descubrió las Carolinas y al año siguiente Jorge de Meneses arribó a Nueva Guinea. También los holandeses navegaron la región, y Abel Jansoon Tasman recorrió el litoral de Australia en 1642 descubrió la isla que en su honor se llamó Tasmania y las islas Tonga, Fiji y Bismark. Entre tanto desde Acapulco (Méjico) y Callao (Perú) partieron expediciones que hallaron numerosas islas del Pacífico. Las rivalidades portuguesas y holandesas fue reemplazada por la de los ingleses y franceses en el siglo XVIII. Entre 1764 y 1770 exploraron la zona John Byron, Samuel Waltis, Felix Carteret y otros, quienes recorrieron Taití, Samor, Solomón y Nuevas Hébridas. Por su parte, el inglés James Cook realizó tres viajes por islas de Pacífico entre 1768 y 1779, y llegó a las Islas de la Sociedad, Nueva Zelanda, Las Marquesas, Nuevas Hébridas y Hawai. Los franceses exploraron las islas simultáneamente con los ingleses. Entre 1785 y 1787 lo hizo J. F. Laperouse y luego Dumont d'Urbille y Entrecasteux. Todos estos viajes determinaron el reparto de Oceanía entre las potencias colonizadoras: Gran Bretaña, Francia y EE.UU.
Oceanía es lo que queda de una formación continental e insular mucho mayor que se hundió en épocas remotas. Las islas mayores son fragmentos desprendidos del territorio continental por movimientos orogénicos. Las islas volcánicas se originaron el cordilleras submarinas; son pequeñas casi siempre, y presentan altas montañas con cráteres apagados o activos. Las Islas Coralinas se formaron por lenta acumulación de corales y se extienden desde el Ecuador hasta los 25° o 30° de latitud norte y sur. Las islas occidentales tienen por basamento una cordillera que forma grandes arcos paralelos a la costa asiática. Hacia el centro de la cuenca se observan fallas tectónicas con fosas marinas profundas.
La mayor altura de Oceanía es el cerro Punkak Jaya (5.030 m.). Esta zona es frecuentemente agitada por terremotos y maremotos. Muchas islas constituyen cumbres de montañas hundidas en el océano.
La Oceanía tiene una economía predominantemente agrícola. El clima es ideal para cultivos tropicales. El principal producto de las islas es la copra, médula del coco, también la caña de azúcar, el café, la vainilla, los cereales, en especial el trigo,
árboles frutales de clima húmedo, bananas y ananá. ganadería ha prosperado en Australia y Nueva Zelanda. El primero de estos países posee el mayor stock mundial de ganado ovino y es el principal exportador de lana.
La pesca se ha desarrollado con preferencia en las islas coralinas, donde constituye la base de la alimentación; además de pescado, se obtienen moluscos, cangrejos y tortugas.
Las ostras perlíferas constituyen otra actividad importante en este continente.
Los minerales que se extraen son el oro, plata, plomo, estaño, cinc, tungsteno, níquel, hierro, cromo y cobalto.
En Hawaii prosperan el turismo y la industria azucarera y conserva; en las demás islas solo se producen artesanías: hilanderías, alfarerías, canastos y esteras