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La armas y utensilios que existen en este período en que el hombre fue ante todo un cazador, son muy toscas.
Además de tallar la piedra, el hombre aprendió a aprovechar los huesos para hacer agujas, puntas de lanzas y arpones.
Los
artefactos humanos más antiguos que se conocen son las hachas manuales
de piedra encontradas en África, en el este de Asia y en Europa. Datan,
aproximadamente, del 250.000 a.C., y sirven para definir el comienzo de
la edad de piedra. Los primeros fabricantes de herramientas fueron
grupos nómadas de cazadores que usaban las caras afiladas de la piedra
para cortar su comida y fabricar ropa y tiendas. Alrededor del
100.000 a.C., las cuevas de los ancestros homínidos de los hombres
modernos contenían hachas ovaladas, rascadores, cuchillos y otros
instrumentos de piedra que indicaban que el hacha de mano original se
había convertido en una herramienta para fabricar otras herramientas.
Los utensilios utilizados por el hombre prehistórico son el eje central de la exposición que inaugura hoy el Museo Vasco de Bilbao y que estará abierta hasta el próximo 25 de abril. Manos a la piedra exhibe 150 piezas procedentes de yacimientos de Vizcaya. Dividida en tres partados, la muestra consta de urnas que presentan los utensilios y de paneles que ofrecen explicaciones tanto sobre su uso como de su fabricación. Un vídeo completa el recorrido.
La exposición, presentada ayer, exige del espectador una visita "pausada, con calma", como indicó la diputada de Cultura de Vizcaya, Belén Greaves. "Aconsejaría al visitante que haga el recorrido por nuestra historia sin prisas, y utilizando la imaginación", indicó. Las piezas que se presentan proceden de los fondos propiedad del Museo Vasco y se hallaron todas ellas en yacimientos excavados en Vizcaya, preferentemente en los de Santimamiñe, en la comarca de Urdaibai, y en las canteras de Atxarte, en Abadiño.
La diputada resaltó el caracter eminentemente didáctico de Manos a la piedra, lo que la hace muy recomendable "en estas fechas en que los escolares están libres, porque puede convertirse en una actividad vacacional más para compartir con el público infantil".