Respuestas
La sangre es un derivado del tejido conectivo, formado por una fase intercelular líquida llamada plasma y una fase sólida de elementos celulares (glóbulos rojos y glóbulos blancos) y no celulares (plaquetas). Todos los componentes de la sangre deben tener una concentración óptima para que los procesos biológicos puedan llevarse a cabo de manera eficiente. Cualquier alteración manifiesta en alguno de ellos provoca diversas anomalías, como mal funcionamiento de algún órgano o estructura corporal o enfermedades de variada etiología.
La sangre utiliza el sistema cardiovascular para llegar a las partes más íntimas del organismo, asegurando un riego permanente a los tejidos, permitiendo innumerables reacciones bioquímicas y brindando un aporte constante de sustancias indispensables para las células, para la vida.
La sangre es un derivado del tejido conectivo, formado por una fase intercelular líquida llamada plasma y una fase sólida de elementos celulares (glóbulos rojos y glóbulos blancos) y no celulares (plaquetas). Todos los componentes de la sangre deben tener una concentración óptima para que los procesos biológicos puedan llevarse a cabo de manera eficiente. Cualquier alteración manifiesta en alguno de ellos provoca diversas anomalías, como mal funcionamiento de algún órgano o estructura corporal o enfermedades de variada etiología.
La sangre utiliza el sistema cardiovascular para llegar a las partes más íntimas del organismo, asegurando un riego permanente a los tejidos, permitiendo innumerables reacciones bioquímicas y brindando un aporte constante de sustancias indispensables para las células, para la vida.