Respuestas
Consejos
Si la audiencia se ríe, haz una pausa hasta que dejen de hacerlo; de lo contrario, nadie podrá escucharte.
Que sea memorable. Si bien hay pautas que debes seguir, darle ese toque personal lo hará parecer reflexivo en lugar de obligatorio.
Practica antes del evento. Tómate el tiempo.
Hablar acerca de cuántas personas y quiénes cambiaron tu vida con el premio o certificado.
Haz que la audiencia se interese en lo que estás hablando.
Mientras hables con la audiencia, permanece en el tema.
Si es posible, toca las emociones de las personas. ¿Cómo esta experiencia cambió tu vida?
Utiliza el humor para mantener interesas a las personas.
Que sea breve. Los discursos largos son aburridos y más difíciles de memorizar.
¡Memorízalo! Lucirás como un aficionado si llevas un discurso o usas tarjetas de memoria.
Advertencias
Quédate quieto. No te muevas demasiado. De lo contrario, distraerás de tu mensaje y credibilidad.
Evita los enunciados negativos o de disculpa.
Mientras hablas, usa palabras exactas para que el discurso sea claro y simple.
No fuerces el humor. No todos son comediantes y nada avergonzará más a tu audiencia que un chiste malo.
suerte si puedes no les tengas miedo a nadie da lo mejor de ti se que con estos pasas vas a poder confio en ti
Cómo Aceptarse A Si Mismo (A Pesar De Los Defectos) | Desarrollo Personal
Cómo Aceptarse A Si Mismo (A Pesar De Los Defectos)
Aceptarte significa reconocer a nivel personal que tú eres la persona que eres, aceptar la realidad de tu cuerpo y tu mente.
Si no te aceptas, no puedes tener una autoestima sana.
Negar tus emociones, tus pensamientos o tus acciones equivale a decirte que tu personalidad real no es válida y te lleva a crearte una falsa imagen de ti mismo/a. Hasta que no aceptes esa faceta de ti que estás desterrando de tu conciencia no podrás cambiarla ni mejorarla.
¿Puede una persona que lucha contra su realidad, que niega sus emociones o sus circunstancias, confiar y respetarse a sí misma?
Aceptarte no necesariamente significa que:
Debas aprobar lo que aceptas: Aceptarte es reconocer y experimentar tu realidad tal y como es, sin juicios. Esto no significa que, por ejemplo, si eres una persona desorganizada apruebes tu forma actual de comportamiento.Una vez has aceptado tu situación es posible valorar si tus acciones son correctas o no. Aceptar tu desorganización actual es lo que te permite ser consciente de que estás haciendo bien y que es lo podrías mejorar.
No te importe cambiar o mejorar: Aceptarte no implica conformidad con tus acciones. Irónicamente es imposible cambiar o mejorar algo que no aceptas porque lo estás expulsando de tu consciencia. Es como si creases una barrera mental para protegerte de una parte de tu mente con la que no quieres enfrentarte.Mientras no aceptes esta parte de ti no es posible cambiarla. Si tienes sobrepeso pero expulsas de tu consciencia la idea que puede ser negativo para tu salud, nunca tomarás la decisión de adelgazar.
Autoconocimiento
La autoaceptación requiere que te conozcas lo suficiente como para ser consciente de qué aspectos de tu personalidad estás negando. La mejor forma de aumentar tu autoconocimiento es preguntarte continuamente por la causa de tus pensamientos, emociones y acciones.
Ante cualquier signo de incongruencia interna, de insatisfacción, de preocupación, no dejes escapar la oportunidad de aprender una valiosa lección sobre ti mismo/a.
Los 3 Niveles De Aceptación
La autoaceptación se divide en 3 niveles. Para mí estos niveles van desde la parte más íntima de tu autoestima a la más externa, como las capas de una cebolla. Si no te aceptas en el nivel 1, esto afectará tu aceptación en los niveles 2 y 3.
Nivel 1 – La esencia de la autoestima
En el primer nivel encontramos la cualidad más profunda de la autoestima. Es la creencia básica de que eres digno/a de existir y que tienes derecho como ser humano a vivir una vida digna y feliz.
Solo por el hecho de existir, de ser humano/a, tienes derecho a tener deseos y intentar satisfacerlos, tener emociones y expresarlas, de vivir, amar y aprender.
La persona que no se acepta a este nivel estará en constante lucha interior y tenderá a sabotear sus propios éxitos, negar sus logros y huir de sus sentimientos positivos ya que en el fondo siente que no los merece, que se deben a la casualidad o que son un error.
Nivel 2 – Aceptar tu personalidad
El segundo nivel consiste en aceptar la manifestación de tu personalidad, aceptar tus pensamientos, tus emociones y tu comportamiento, tus acciones y permitirte experimentarla sin bloqueos.
A veces es difícil aceptar ciertos rasgos de nuestra personalidad o nuestro físico cuando nos desagradan y no queremos centrarnos en ellos.
¿Te comportas de forma fría con otras personas? ¿Eres tímido/a? ¿Te preocupas poco por las personas que te rodean? ¿Crees que no puedes confiar en otras personas? ¿Tomas riesgos sin valorar las consecuencias? ¿Te sientes muy inseguro/a ante situaciones nuevas? ¿Eres desorganizado/a? ¿Piensas que tu trabajo actual no aporta nada a la sociedad?
Tendemos a negar inconscientemente nuestras emociones negativas, nuestros pensamientos indeseados y las decisiones de las que nos arrepentimos. Aceptarlos no significa que tengamos que aprobarlos, sino que nos permitimos reconocerlos y experimentarlos de forma natural.
Nivel 3 – Ser tu propio amigo/a
Imagina que acabas de ver el Ferrari nuevo que se ha comprado tu jefe y te mueres de envidia por dentro. Por suerte eres consciente de tu envidia y te permites experimentarla plenamente.
El nivel 3 que consiste en tratarte como un buen amigo/a lo haría. ¿Qué haría un buen amigo al ver tu envidia frente al coche de tu jefe? Tu amigo te diría que no es malo sentirte así y te preguntaría porque sientes envidia. ¿Quizás tus ingresos no te permiten vivir como te gustaría? ¿Quizás te gustaría ser una persona exitosa y popular? ¿Quizás te molesta que tu jefe derroche el dinero en un coche tan lujoso?
Ser tu propio amigo/a implica analizar y entender las causas y consecuencias de tu comportamiento, el origen de tus emociones y pensamientos, ser comprensivo con tus errores y animarte a mejorar tus puntos débiles.