Respuestas
Las cadenas alimenticias tardan siglos en establecerse y equilibrarse; los componentes de un ecosistema son tan importantes que si faltara alguno, se rompería todo su equilibrio.
Por otra parte, los ecosistemas pueden sufrir alteraciones naturales y por acción humana: las alteraciones naturales forman parte del equilibrio natural y los ecosistemas generalmente se recuperan restableciendo el equilibrio; en cambio las alteraciones por acción humana son más peligrosas, se prolongan por mucho tiempo, abarcan grandes zonas y generalmente son irreversibles, produciendo la extinción de especies y la alteración del ambiente.
Algunos factores que alteran los ecosistemas
1. Desastres naturales como erupciones volcánicas, inundaciones, deslizamientos, vendavales, entre otros.
2. Tala indiscriminada de los bosques y el sobre pastoreo.
3. Caza ilimitada de animales.
4. La introducción de elementos extraños al ecosistema.
5. Contaminación ambiental, como los derrames de petróleo; derrames cloaca les crudos.
6. Aumento de la población con la construcción de casas, autopistas y ciudades.
7. La contaminación auditiva y el monóxido de carbono de los vehículos.
8. La no separación adecuada de las basuras (reciclaje).
9. El uso de los aerosoles y otras sustancias que desgastan la capa de ozono.
10. El uso inadecuado de la electricidad, ya que estos desgastan los embalses naturales lo cual contribuye al calentamiento solar.CAMBIOS EN LOS ECOSISTEMAS A LO LARGO DEL TIEMPO¿Qué se sabe acerca de la inercia de los ecosistemas y la velocidad de los cambios?
Esta cuestión trata de:
•Las escalas temporales del cambio: cuánto tiempo tardan en manifestarse los efectos derivados de un cambio en un ecosistema (también llamado desfase temporal).
•Inercia: el tiempo que tarda un ecosistema en responder a ciertos factores de cambio.
Muchos de los impactos, tanto positivos como negativos, que los seres humanos tienen sobre los ecosistemas tardan en manifestarse. Esto puede hacer que los costes asociados a los cambios actuales en los ecosistemas sean trasladados a generaciones futuras. Por ejemplo, el empleo de fuentes de agua subterránea puede superar la capacidad de recarga durante algún tiempo hasta que comiencen a aumentar sustancialmente los costes de extracción. En general, la gente gestiona los ecosistemas de tal forma que aumentan los beneficios a corto plazo sin tener en cuenta o ignorando los costes a largo plazo.
Los distintos servicios de los ecosistemas tienden a cambiar en escalas de tiempo diferentes, de forma que resulta difícil para los que gestionan evaluar correctamente las contrapartidas negativas de las decisiones. Por ejemplo, los servicios de apoyo (como la formación de suelo o el crecimiento vegetal) y los servicios de regulación (como la regulación del agua y de enfermedades) tienden a cambiar en escalas de tiempo mucho mayores que los servicios de provisión. En consecuencia, suelen pasarse por alto los impactos en aquellos servicios que cambian más lentamente